Olivia Wilson comenzó con la fotografía a muy temprana edad. Una vez su abuelo le regaló una cámara de fotos “Zenith” y, a partir de aquél momento, se volvieron inseparables.

En el secundario, Olivia era la fotográfa del periódico escolar, y durante sus años en la universidad se ganaba la vida dedicándose a la fotografía etnográfica, creando imágenes ideales.

Luego de su graduación, decidió enfocarse exclusivamente en la fotografía, y en apenas un par de meses logró abrir su propio estudio fotográfico. 

Fotógrafa

Isabel cuenta con más de diez años de experiencia: es capaz de crear cualquier cosa, desde una simple fotografía sobre determinada temática a una sesión de fotos artísticas.

Hace tres años y medio estuvo trabajando en un estudio fotográfico en México, allí se familiarizó con las tendencias europeas en fotografía de bodas. 

Fotógrafo 

Nicolás comenzó fotografía cuando aún era un estudiante, concurriendo a la escuela secundaria de Bellas Artes en París. Doblegado por su pasión por la pintura, se las arregla para agregar cierto toque artístico a todas sus fotos.

Además, concurrió a la prestigiosa Escuela de Fotografía de Milán, y realizó pasantías en la revista de modas ELLE. Nicolás tiene una experiencia de más de 5 años en sesiones fotográficas, siendo “Historia de Amor”, de Italia, una de las más representativas.

Él cree que el amor puede ser inmortalizado al capturar imágenes en movimiento en una fotografía.